“Los clientes no esperan que seas perfecto. Lo que esperan es que arregles las cosas cuando se complican.”

Donald Porter,
Customer service director British airways

Hoy estoy en plan bélico… Los comerciales son como la infantería de la empresa, como en toda guerra por muchos medios que tengas si la infantería no toma el lugar, no se ha conquistado el territorio (cliente). Además la moral de la infantería es determinante en todas las batallas, lo imprescindible para que esta infantería de comerciales sean eficaces es que tengan la moral lo más alta posible.

Respecto a la soledad, no quiero hablar de la cantidad de kilómetros ni de las comidas infames que a veces tenemos que asumir. Ni quiero hablar de la soledad física del comercial, de las horas en la carretera, en el hall de un aeropuerto o en una habitación de hotel. Al fin y al cabo va con el trabajo que hemos elegido.

Hoy voy a hablar de cuando te dejan solo, de cuando te sientes solo entre el cliente y la empresa. Cierras un trato, ofreces una solución, hay una urgencia y ahí empiezan tus problemas, descubres que lo que es prioridad para ti no lo es para otro de la empresa, a veces porque no quieren problemas, a veces porque no tienen medios… que si no hay, que no llegamos, que no tenemos, que si la forma de pago… y tu ahí solo en medio con tu palabra comprometida, la moral por los suelos y el cliente sin atender…

Esto ocurre realmente cuando la empresa en la que trabajas no está centrada en el cliente.

El resto de los trabajadores que no son comerciales no deben dejar solos a los comerciales, deben implicarse de inmediato porque en ningún ejército (empresa) se deja a la infantería (comerciales) sin soporte. Los clientes son de toda la compañía y ellos son los que nos pagan el sueldo a todos. Si no hubiese problemas el trabajo lo harían las maquinas.

La infantería también puede hacer algo para que no le dejen sola (no se ponen a dar tiros sin saber si va a haber apoyo de artillería o aviación o al menos sin avisar…):

De qué modo no te dejaran solo:

– Asegúrate que el plazo que das es el correcto si puedes y lo das más largo mejor.
– Asegúrate que tenemos y en qué plazo se lo podemos dar sin problemas tanto de servicio como material.
– Deja en el aire la forma de pago hasta el último momento y discútelo con el responsable de créditos antes de dar respuesta definitiva (fuerza esa opción).
– Conoce las capacidades de operaciones y Servicios técnicos de tu zona para dar una respuesta.

A veces una simple llamada para asegurarse evita que nos dejen solos.

En fin espero que esto al menos sirva para conocer que a todos nos pasa en alguna ocasión o al menos nos ha pasado. Aunque mal de muchos…

¿Y a ti? ¿Te dejaron solo en alguna ocasión?
Saludos